domingo, 20 de diciembre de 2009

Y siguen su proceso

Felicidades al Fútbol Club Barcelona que ha hecho historia y lo ha ganado todo en este año 2009, bueno, casi todo, porque hay algo que están perdiendo poco a poco, a cada instante que pasa, con cada actuación de Juan Lapuerta, su presidente, confundiendo cada dos por tres deporte y política…Por eso este año el F.C. Barcelona ha perdido el título más importante que disputaba, y es que ya hay quienes no se alegran de que el Barcelona gane trofeos en Europa y el Mundo, empieza a haber españoles que no guardan cariño alguno a ese club, y todos sabemos sobradamente los motivos.
El Barcelona y Cataluña sufren cada vez más a los, me voy a callar el comentario, de los independentistas, que parece que no se han querido percatar que no son más que una minoría en Cataluña, para ello me baso en el porcentaje de los ruegos de independencia de los pueblecitos en los que mandan: Tirando por encima, un 30% de participación y un 95% del voto del sí: resultado un 28,5 % de los catalanes quieren la independencia, vamos que ni un tercio, a pesar de haber contado con el voto fácilmente manipulable de jóvenes de entre 16 y 18 años…
Pues no, no se cansan. Ahora parece que se han metido a ecologistas defensores de los animales y han decidido tramitar la posible prohibición de la tauromaquia en Cataluña, todo por desespañolizar su región. Yo me pregunto: ¿Los defensores de los animales qué opinan de la matanza de los chivos de los musulmanes? ¿Y de la caza? ¿Y de los bous del bajo Ebro? ¿Y…? Pobre infelices, lo malo es que no se dan cuentan de que este año van a poder darse un baño de cava mientras se hartan de yogures, les dolerá bastante y seguirán sin darse cuenta de por qué, cada vez más, en España se les está respondiendo con un ataque al único sitio que les duele, porque la pela es la pela.

1 comentario:

  1. Que locura de nacionalismos: que si España es una; que si Catalunya otra; que si la patria, la bandera, el himno, el idioma...

    Cristo vivió y murió por la humanidad, por la igualdad entre los hombres, por la abolición de patrias y fronteras... y todo ello porque nuestro único reino es el de Dios y nuestro guía la FE en Jesús.

    Nadie que se quiera llamar cristiano puede ser nacionalista y ningún nacionalismo podrá ser cristiano.

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